Entre las medidas concretas figuran la creación de centros de cribado avanzados basados en la inteligencia artificial para la asistencia sanitaria y el apoyo al desarrollo de modelos de vanguardia y de IA agente adaptados a sectores como la industria manufacturera, el medio ambiente y la industria farmacéutica.
Para impulsar la adopción de la inteligencia artificial y apoyar estas medidas, la Comisión va a movilizar alrededor de 1 000 millones de euros. En el futuro, estos sectores podrían complementarse con nuevas iniciativas en ámbitos como las finanzas, el turismo y el comercio electrónico.
La estrategia contribuirá a impulsar las capacidades de la UE para reportar ventajas sociales, desde la facilitación de diagnósticos sanitarios más precisos hasta la mejora de la eficiencia y la accesibilidad de los servicios públicos. También fomentará la mentalidad de priorizar la inteligencia artificial, de manera que más empresas la consideren parte de la solución a la hora de afrontar sus retos, teniendo muy en cuenta las ventajas y los riesgos de esta tecnología.
La estrategia también se ocupa de otros desafíos transversales: abreviar el plazo de comercialización mediante la vinculación de infraestructuras, datos e instalaciones de ensayo; capacitar a la mano de obra de la UE, de forma que esté preparada para la inteligencia artificial en todos los sectores, y poner en marcha una iniciativa «Inteligencia artificial de vanguardia» para apoyar la innovación reuniendo a las principales partes interesadas en la inteligencia artificial de Europa. La renovación y el despliegue de la red de centros europeos de innovación digital, transformados en centros de experiencia para la inteligencia artificial, ofrecerán a las empresas un acceso privilegiado al ecosistema de innovación de la UE en materia de inteligencia artificial.
